Conducta Adaptativa y ABAS-II: Claves para la Autonomía y Funcionalidad 🧠✅
Cuando hablamos de desarrollo y bienestar, a menudo nos centramos en la inteligencia académica. Sin embargo, para que una persona pueda desenvolverse plenamente en su vida diaria, necesitamos mirar hacia otro lado: la conducta adaptativa.
Según Shalock et al. (2010), la conducta adaptativa es el conjunto de habilidades conceptuales, sociales y prácticas aprendidas por una persona para funcionar de manera efectiva en su día a día.
🔎 Más allá del Coeficiente Intelectual
Es fundamental comprender que el diagnóstico de una Discapacidad Intelectual (DI) no debe basarse únicamente en los resultados de pruebas de inteligencia (CI). Es indispensable evaluar la conducta adaptativa desde una perspectiva de:
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Independencia.
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Funcionalidad.
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Socialización.
Si existen problemas en estas áreas, la adaptación del paciente se verá afectada en múltiples entornos, como el familiar, escolar, laboral y social (Morrison y Flegel, 2018).
Además, esta evaluación no es exclusiva para la DI; es crucial en otros trastornos del neurodesarrollo como:
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Trastorno del Espectro Autista (TEA).
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Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
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Síndrome de Down, entre otros.
🧠 El Enfoque Neuropsicológico
Desde la neuropsicología, sabemos que las funciones ejecutivas son esenciales para dirigir nuestra conducta hacia metas. Autores como Roselló-Miranda (2018) señalan que estas funciones influyen directamente en las habilidades sociales y la comunicación, pilares de la conducta adaptativa.
Por ello, al evaluar, no solo miramos la conducta, sino que aplicamos pruebas neuropsicológicas para precisar el perfil cognitivo (fortalezas y debilidades), lo cual será el punto de partida para cualquier programa de intervención.
✅ ABAS-II: El Sistema de Evaluación de la Conducta Adaptativa
Para medir estas habilidades con precisión, los profesionales de la Salud Mental contamos con herramientas como el ABAS-II. Esta prueba determina el grado de funcionamiento de una persona considerando su edad y las demandas de su entorno.
¿Qué hace al ABAS-II una herramienta tan valiosa?
El ABAS-II destaca por dos características principales:
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Es Multidimensional: Evalúa una gran diversidad de áreas, desde comunicación y ocio, hasta autocuidado, seguridad y habilidades motoras.
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Es Multimétodo: Permite recopilar información de múltiples informantes (familia, escuela y autoinforme en adultos). Esto nos brinda una visión "360 grados" del paciente, haciendo la evaluación mucho más íntegra y confiable al contrastar diferentes contextos.
📊 Las 10 Áreas de Habilidad y sus Índices
El ABAS-II se desglosa en índices que agrupan habilidades específicas:
1. Índice Conceptual
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Comunicación: Hablar, escuchar, conversar y comunicación no verbal.
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Habilidades académicas funcionales: Lectura, escritura y matemáticas aplicadas a la vida real.
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Autodirección: Capacidad de realizar tareas, cumplir plazos, seguir instrucciones y tener autocontrol.
2. Índice Social
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Ocio: Participación en juegos y actividades recreativas.
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Socialización: Hacer y mantener amistades, llevarse bien con otros y comunicar emociones apropiadamente. Como indica Caballo (1986), se trata de expresar sentimientos y derechos respetando a los demás para minimizar conflictos.
3. Índice Práctico
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Utilización de recursos comunitarios: Compras, transporte, manejo del dinero.
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Vida en el hogar/escuela: Limpieza, orden, cuidado de objetos.
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Salud y seguridad: Uso de medicamentos, precaución, seguir normas.
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Autocuidado: Alimentación, vestido, higiene personal.
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Empleo (Adultos): Cumplimiento de horarios e instrucciones laborales.
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Habilidades motoras (Niños <5 años): Motricidad fina y gruesa.
Todo esto conforma la Conducta Adaptativa General, una puntuación global que nos dice cómo responde la persona al medio en comparación con otras de su misma edad.
⚡️ Beneficios de una Evaluación Funcional
En mi experiencia clínica en Neuropsyedu, el uso del ABAS-II ofrece ventajas incalculables:
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Diagnóstico Preciso: Cumple con los criterios del DSM-V para discapacidad intelectual, confirmando si existen deficiencias que impiden una vida autónoma.
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Planificación de Intervención: Al identificar qué apoyos específicos necesita el paciente, podemos crear programas a medida para el hogar, la escuela y la comunidad.
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Visión Holística: Útil en casos de autismo, problemas de aprendizaje, dificultades emocionales, discapacidades motoras y trastornos genéticos.
¿El motivo principal? Conocer la capacidad de una persona para ser independiente tiene un impacto mayor en su tratamiento que solo conocer la "etiqueta" diagnóstica. Ayuda a familias y colegios a entender qué hacer.
🎮 Tecnología vs. Conducta Adaptativa: Una Alerta Necesaria
¿Cómo influyen las pantallas en estas habilidades? Un estudio realizado en Turquía por Atl et al. (2019) arrojó resultados reveladores:
El uso de tecnología por parte de los padres tuvo un impacto directo en los niveles de conducta adaptativa de niños de entre 18 a 24 meses.
El estudio encontró que los niños cuyas madres NO fomentaban actividades tecnológicas (celulares, videos) presentaban niveles más elevados de conducta adaptativa en comparación con aquellos expuestos a pantallas.
La trampa del "Aburrimiento" 👀👉🏼
Desde mi experiencia y apoyándome en la literatura (Gunuc y Atli, 2018), he notado que muchos padres entregan el celular para evitar que el niño se aburra, buscando gratificación inmediata.
El aburrimiento forma parte de la vida. Como adultos, debemos enseñar maneras funcionales de sobrellevarlo. Fomentar juegos de estimulación neuropsicológica (memoria, atención, lenguaje) es una excelente forma de potenciar la independencia sin depender de pantallas.
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Si te preocupa el desarrollo de la autonomía de tu hijo o requieres una evaluación especializada, estoy aquí para ayudarte.
📚 Referencias Bibliográficas
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Caballo, V. (Ed.). (2007). Manual de entrenamiento y evaluación de las habilidades sociales (7ª ed.). Madrid: Siglo XXI.
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Gunuc, S., y Atli, S. (2018). Parents’ views on the impact of technology on 18 to 24-month old infants. Addicta: The Turkish Journal on Addictions, 5, 205–226.
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Krause, A., et al. (2016). Caracterización de la conducta adaptativa en escolares con y sin discapacidad intelectual. Diversitas: Perspectivas en Psicología, 12(1), 27-36.
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Morrison, J., y Flegel, K. (2018). La entrevista en niños y adolescentes. Habilidades y estrategias para el diagnóstico eficaz del DSM-5®. Manual Moderno.
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Sabat, C., et al. (2020). Different abilities needed at home and school: The relation between executive function and adaptive behaviour in adolescents with Down syndrome. Scientific Reports, 10(1), 1683.
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Schalock, R., et al. (2010). Intellectual Disability: Definition, Classification, And Systems Of Supports (11th Ed.). AAIDD.